ALEGA participa en la ronda de comparecencias para el desarrollo de la Ley LGTBI

05 de marzo de 2020

Consideramos urgente la aprobación de la misma y no aceptaremos una versión

La ex presidenta de Alega, Kiara Brambilla, ha subrayado este miércoles en el Parlamento la urgencia de la ley LGTBI de Cantabria y ha advertido de que la asociación no aceptará que se apruebe una norma «descafeinada» que no proteja los derechos de estas personas.

Brambilla, que ha comparecido en la Comisión de Universidades, Igualdad, Cultura y Deporte, ha pedido a los grupos parlamentarios «compromiso» en la tramitación de esta norma, más allá de la intención de que esté aprobada en el Día del Orgullo. Según la ex presidenta de Alega, se trata de una ley de mínimos comparable a la que se han aprobado en Cataluña o la Comunidad Valenciana, cuya urgencia es «máxima», informa EFE.

La asociación participó en la redacción de este proyecto de ley de garantía de los derechos de las personas lesbianas, gais, trans, transgénero, bisexuales e intersexuales y no discriminación por razón de orientación sexual e identidad de género, que se quedó en el cajón en la pasada legislatura.
 

Brambilla ha recordado que entonces se pidió a los grupos políticos que no pidieran comparecencias para no retrasar su aprobación, con el resultado de que se solicitaron 17, cuando «estaba en peligro la ley», el doble de las que se han fijado «ahora que hay tiempo», nueve. «Perdimos ilusión pero no esperanza porque la urgencia de la ley sigue siendo máxima», ha asegurado.

A las personas LGTBI se les ha considerado delincuentes, enfermas y pecadoras hasta no hace tanto tiempo: en 1978 se despenalizó en España la homosexualidad y la transexualidad se ha considerado un trastorno hasta 2017, el mismo año en el que Cantabria empezó a tramitar su ley, ha explicado. Y en estos momentos, ha añadido, los delitos de odio son «una preocupación de primer orden», hasta el punto de que ir de la mano para una pareja homosexual «es un riesgo para la integridad física», y aún hay muchas agresiones que se ocultan.

Brambilla ha incidido en esa denuncia cuando ha respondido a las críticas del diputado del PP César Pascual, quien se ha mostrado «decepcionado» porque esperaba, ha dicho, una intervención «más en positivo» sobre la ley y menos reivindicación y tono «amenazante». Le ha contestado que no puede hablar en positivo cuando esta misma semana Alega ha tenido que atender a una pareja que ha sido agredida en su propio portal por ser gay.

Ha alertado también de que España, que fue el tercer país en aprobar el matrimonio entre personas del mismo sexo, ha ido descendiendo en derechos LGTBI y en los últimos años ha pasado del segundo puesto a desaparecer de los diez primeros.

Ya entrando en el texto, ha planteado que se debería eliminar la palabra «miedo» de la definición de la lgtbifobia y ha resaltado la importancia de que se prohíban las terapias de aversión, que no solo no funcionan sino que «destruyen a las personas» y son, por tanto, un tipo de maltrato.

Para Brambilla, una de las razones para aprobar con urgencia la ley es acabar con el acoso escolar con una educación afectiva y sexual en la escuela, que puede ser «un salvavidas» para muchos menores que se sienten rechazados y culpables, además de fomentar el respeto a la diversidad y a la libertad entre todos los niños. A su juicio, quien está en contra de estas charlas «está en contra de los derechos humanos».

En su opinión, también es esencial formar al profesorado en materia de diversidad sexual y familiar, y ni siquiera toca la temática LGTBI en sus estudios universitarios.

Brambilla ha recordado también las declaraciones de Vox sobre la homosexualidad o la defensa de la «familia natural» después de que su representante en la comisión, Armando Blanco, le pidiera que concretara una referencia en su comparecencia a «grupos fanáticos» cuando ha hablado sobre el maltrato al colectivo LGTBI.

Blanco ha respondido a la alusión a la familia natural y ha argumentado que el hecho de que Vox la defienda, porque es «un pilar básico de la sociedad», no quiere decir que esté en contra de los derechos y la libertad de las personas. «Le podría decir a usted que tiene heterofobía por defender al colectivo LGTBI», ha añadido.

«Yo también soy natural y la familia que formo con mi pareja también. No somos robots», le ha replicado la presidenta de Alega, quien ha puesto en duda que Vox esté a favor de los derechos de las personas LGTBI cuando está en contra del matrimonio homosexual.

Si quieres ver toda la comparecencia pincha en el siguiente enlace: https://parlamento-cantabria.es/videoteca/sesion/comisi%C3%B3n-de-universidades-igualdad-cultura-y-deporte-5